Bronquiolitis
Es una infección que provoca la inflamación y obstrucción de los bronquiolos, y dificulta la respiración. Está provocada por unos virus, siendo más frecuente entre los meses de noviembre y marzo
Sus causas, los virus
- El más frecuente es el Virus Respiratorio Sincitial (VRS).
- También puede ser provocado por otros virus (rinovirus, adenovirus, influenza…).
Población afectada
- Mayoritariamente los menores de 2 años.
- Entre 2 y 6 meses: es la etapa en la que se presentan bronquiolitis más severas.
- Un 7%-14% precisarán ser hospitalizados, debido a la gravedad de los síntomas,
- Cerca del 90% van a ser leves y pueden ser tratadas por el pediatra de Atención Primaria.
Otros factores de riesgo
Circunstancias que pueden predisponer a presentar mayor afectación y gravedad en una bronquiolitis, y en las que hay que extremar las medidas de prevención de la enfermedad.
- Edad: menor de 6 meses y, en especial, menor de 3 meses.
- Los que han nacido prematuros.
- Niños con enfermedades broncopulmonares, cardíacas o inmunológicas.
- Niños con síndromes malformativos.
- Fibrosis quística.
El contagio
Cuando un niño con bronquiolitis tose o estornuda, se expulsan unas gotitas de saliva o mucosidad cargadas de virus, pudiendo así contagiar a las personas que están en su entorno.
También se pueden contagiar los niños que manipulan objetos contaminados con el virus (juguetes, chupetes,..) y luego se tocan ojos, nariz o boca,
Síntomas
- Se inicia con un cuadro catarral
- mocos claros
- algo de tos
- estornudos
- incluso fiebre que no tiene que ser alta.
- La afectación puede ser leve.
- La tos se hace más intensa, siendo el mecanismo por el que expulsan la mucosidad que está en sus bronquiolos.
- Esto provoca un problema en el de paso de aire por los bronquiolos, provocando una dificultad respiratoria progresiva con:
- Respiración más rápida.
- Tiraje de las costillas o movimiento abdominal.
- Se oyen pitos o sibilancias (silbidos) directamente audibles o al auscultar al niño.
- Cierta irritabilidad.
- Inicia rechazo del alimento.
- Cuando la afectación es grave, se precisa el ingreso hospitalario.
- Aumenta la dificultad respiratoria, con baja saturación de oxígeno (y más de 60 respiraciones /minuto).
- Aumenta el tiraje de los músculos respiratorios.
- Estado general afectado.
- Cambio de color alrededor de la boca, azul-morado (cianosis).
- Puede tener pausas de apnea (dejar de respirar).
- Incapacidad para alimentarse.
Diagnóstico
Se basa en la exploración clínica, no precisando analíticas ni estudios radiológicos.
- En casos más moderados o severos se pueden medir los niveles de oxígeno en la sangre (pulsioximetría), y ayuda para indicar un tratamiento, y sirve para seguir la evolución.
- Se pueden realizar pruebas de moco nasal para una detección rápida del Virus Sincitial Respiratorio (VRS); así se sabrá si éste es el virus causante y se puede orientar la posibilidad de contagio.
Tratamiento
- Mantener una adecuada oxigenación.
- Cuidar la hidratación: dar líquidos y ofrecer alimentación, poca cantidad pero con frecuencia.
- Mantenerlo en una posición semiincorporada.
- Cuando se precise, se pueden hacer lavados nasales con suero fisiológico o agua de mar.
- Evitar:
- ambientes con humo de cigarrillos.
- lugares con aglomeraciones.
A tener en cuenta
- En niños previamente sanos, los síntomas se reducen de forma progresiva en unos 7-12 días, aunque la tos pueda persistir durante más días.
- La mitad de los niños que han pasado una bronquiolitis, incluso leve, cuando padezcan nuevas infecciones respiratorias pueden volver a tener “pitos”, durante meses.
Cuando buscar una atención urgente
- Al respirar con mucha dificultad.
- Cuando se le hunden las costillas al respirar.
- Presentan rechazo tomar alimentos o líquidos.
- En los casos en que está muy agitado o muy adormilado.
- Si la fiebre es muy alta.
- Se oye un «quejido» al respirar.
- Le cambia el color de los labios (azul-morado).
- Hace pausas al respirar.
¿ Cómo prevenir la bronquiolitis ?
Cuando se tienen los factores de riesgo, hay que extremar las medidas de prevención de ésta enfermedad.
Cuando un niño tiene bronquiolitis:
- No debe acudir a escuelas infantiles o guarderías.
- Debe evitar el contacto con otros lactantes que no estén escolarizados.
- Las personas de su entorno han de realizar lavado frecuente de manos, sobre todo antes y después de tocar al enfermo o a los objetos que utiliza.
- Procurar no ir a lugares concurridos, especialmente donde haya muchos niños.
- Evitar la exposición al humo de tabaco.
Dr. Antonio Redondo Romero
Pediatra – Alicante
Hospital Vithas Medimar Internacional