Cada día 5 comidas

Son las necesarias para mantener los niveles de glucosa en sangre en valores estables durante todo el día.

A partir del año de vida es importante prestar atención a los horarios de las comidas infantiles, además de incorporar nuevos alimentos de forma gradual y probar nuevas texturas, sabores y olores.

Un buen objetivo final sería utilizar el modelo adulto de las 5 comidas diarias, que implica:                                                                               

• su desayuno   
• un tentempié ligero a mitad de mañana
• su comida
• una merienda ligera
• la cena en familia.

 

Los niños pequeños están acostumbrados a tomar por la tarde una merienda-cena y, tras el baño, lactancia materna o un biberón antes de dormir.

A medida que van creciendo el orden debe ser modificado de tal manera que hacia los 3 años el niño ya haga una:

• Merienda ligera
• Cena familiar

Merienda de elección: fruta o lácteo o los dos.

Cena de elección:

• Verdura hervida, carnes ligeras (pechuga, pescado, pavo, lomo), sopa con fideos o cereales, un lácteo.
• Recordar que la cena es el complemento de todas las comidas en el cómputo diario de grupos de alimentos.
• Es muy probable que la cena sea la única comida del día donde pueda coincidir toda la familia.
• Cuando al mediodía se han tomado verduras o legumbres con proteínas animales,  de cena se debe ofrecer cereales (patatas, fideos, arroz) y viceversa.

 

Hay que tener siempre presente los beneficios de comer en familia:  

• Transmitir la manera de comer. 
• Los modelos de conducta alimentaria.  
• Los adultos observan a los niños y, sobre todo los niños a los adultos. 
• Compartir esos momentos.

Así pues, los beneficios de las 5 comidas diarias no son solamente fisiológicos, sino también psicológicos, conductuales y emocionales.

 

Claudia Guerrico

• Nutricionista – PsicoActúa
• Hospital Vithas Medimar Internacional. Alicante